El reciclaje está presente en todos los aspectos de nuestras vidas y las empresas que gestionan residuos nos hacen ser, cada vez más, una sociedad muy comprometida con el medio ambiente. El alto potencial de riesgo por contaminación si se produce un incendio en una de estas empresas, hace que éstas tengan la responsabilidad de evitar que se ocasione un conato en sus instalaciones. La alta efectividad que se alcanza con la combinación de cámaras térmicas y monitores automáticos de agua es una gran solución técnica a la hora de detectar y extinguir incendios en empresas de reciclaje.
Los sistemas y equipos de Protección Contra Incendios que se disponen en las plantas de reciclaje son, normalmente, los que la reglamentación de aplicación establecía cuando comenzó su actividad. De la misma forma, cuando se han producido modificaciones o ampliaciones en la actividad, los medios contra incendios se han adaptado en estos establecimientos a la reglamentación de aplicación en cada momento.
Asegurar el correcto funcionamiento de los sistemas y equipos de protección contra incendios mediante un adecuado mantenimiento nos garantizará que podamos emplear los medios manuales de contra incendio disponibles y que los sistemas funcionen de forma automática cuando se ocasione un incendio. No obstante, desde el punto de vista de las empresas de reciclaje cabe hacerse las siguientes preguntas: ¿Van a exponerse los operarios de manera peligrosa en el caso de una intervención manual? ¿Será suficiente el tiempo de respuesta de los sistemas automáticos de detección y extinción de incendio para asegurar la continuidad de la actividad?
Los incendios en las empresas de reciclaje se suelen producir de dos formas antagónicas. Una de evolución rápida, producida por la fricción de la maquinaría en movimiento unida a los materiales ligeros inflamables sueltos. Otra, de evolución lenta producido por la entrada de focos calientes ocultos que llegan en el interior de los residuos.
Una solución que nos permite minimizar riesgos personales y reducir el tiempo de respuesta ante un incendio en una empresa de reciclaje es la combinación de un sistema de cámaras termográficas para la detección de la elevación de la temperatura en tiempo real en las áreas vigiladas y de un sistema de monitores automáticos de agua para la descarga en los puntos concretos en los que origine ese punto caliente.
Ambos sistemas de Protección Contra Incendios se gestionarán desde un panel de control unificado, mediante softwares personalizados para el funcionamiento en modo automático y dispositivos para la actuación en modo manual. El software de las cámaras es capaz de discriminar los procesos inherentes a la propia actividad que pueden generar puntos calientes (tubos de escape, hornos, motores, etc.) para evitar las falsas alarmas. El software de los monitores permite atacar de forma puntual los focos de calor, dada su gran movilidad posicional, prácticamente 360º, y la variación del alcance del caudal de agua, según el monitor empleado desde 10 hasta 120 metros.
La combinación de estos sistemas de detección y extinción quedará integrada con las instalaciones contra incendios existentes en el centro de trabajo. El sistema de detección de incendios recogerá las señales de alarma producidas y gestionar la activación de las secuencias oportunas. El grupo de presión de agua contra incendios será el encargado de la aportación de las condiciones de presión y caudal necesarias para el funcionamiento de los sistemas.
Los riesgos críticos a proteger y las características constructivas y de distribución de cada centro deben ser estudiadas por profesionales especialistas en protección contra incendios, que ofrecerán para cada uno de ellos la solución más apropiada, basada en el conocimiento propio del usuario de la actividad, las normativas de aplicación y los productos más adecuados existentes en el mercado, contando con los excelentes profesionales de los Servicios Técnicos de éstos.
Álvaro Lázaro Antón, Ingeniero Consultor especialista en Protección Contra Incendios de Iberext